Hermes Desio: “Tenemos muy claro lo que exige la historia de River” El nuevo Director Deportivo del Fútbol Formativo de River contó detalles sobre su metodología de trabajo y se refirió a sus objetivos para esta nueva etapa que comienza en el semillero del Club.

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Por: Rubén Sagarzazu


Fue el elegido para ser el Director Deportivo de las divisiones formativas a partir de este año. Y es porque la idea futbolística de Hermes Desio tiene mucho que ver con la historia de River, donde se encuentran el ADN y el sentido de pertenencia que lo hacen uno de los mejores clubes del mundo a la hora de sacar jugadores de su semillero.

Su carta de presentación habla por sí misma: fue coordinador general de las Selecciones Juveniles de AFA del 2017 al 2019. También se desempeñó como coordinador general de las divisiones formativas de Estudiantes de La Plata (2014) y Talleres de Córdoba (2020), además e haber actuado como ayudante de campo de Andrés Lillini en Pumas de la UNAM, México (2021).

En el arranque de una extensa charla, deja clara su idea: "Como jugador yo siempre tuve una admiración y respeto por aquellos jugadores que hacían algo diferente: gambetear, sacarse la marca de encima demostrando talento. Soy un férreo defensor de ese estilo, que no se pierda la creatividad y la libertad de poder jugar al fútbol, de poder gambetear en los momentos adecuados, cuando lo requiera la situación".

¿Cómo definirías tu rol a la hora de coordinar un equipo de trabajo como el que te toca liderar hoy?
Uno lo que baja es un lineamiento y una metodología de entrenamiento, pero después todo el mundo tiene opinión y tiene que participar. Lo que nosotros no queremos es que hagan algo sin sentirlo. Podés aportar, opinar, porque lo bueno es aceptar la ayuda del otro. El tema comunicativo es fundamental y la estructura de coordinación está para lo que necesiten. Yo les dije a los técnicos que nuestra función es hacerlos mejores a ellos para que a su vez ellos hagan mejores a los chicos. La idea es potenciarlos a todos para que puedan hacer siempre un poco más.

¿Y con respecto a las categorías?
La idea que nosotros tenemos no es hacer categorías por edades sino ir promoviendo a aquellos chicos que se destacan. Obviamente los dividimos por sector: la Primera son los mejores, la Reserva como un buen segundo equipo, la Cuarta como tercer escalón y así sucesivamente. De nada me sirve que un chico sobresalga en su categoría cuando tiene capacidad como para subir a otra. No es adelantarles el proceso sino ir poniéndolos un poquito a prueba. Eso lógicamente tiene sus cambios, porqué hay chicos que se adaptan rápido, a otros les va a costar un poco más, otros pueden aparecer de golpe y ser subidos. La metodología que nosotros proponemos es integral y contamos con gente muy capaz, con ganas y que entienden que estamos en River.

¿Qué cosas les vas a pedir a los jugadores?
Cuando vos sos jugador de River tenés que tener cosas distintas e ir preparándote. No te alcanza con jugar bien a la pelota, sino que debés tener una mentalidad distinta, que te permita vivir en un entorno que va a exigir muchísimo. Por detrás de lo táctico y técnico está la estructura de neurociencia, psicología, nutrición, el colegio e incluso Casa River, donde los chicos están bien contenidos. Por otro lado, queremos que traten de jugar todos los chicos, todos tienen que tener una cantidad de minutos para ser evaluados. Hay muchas cosas que uno tiene en la cabeza y las iremos haciendo de a poco.

¿Y desde lo futbolístico?
Al jugador hay que darle libertad con contenido, mostrarle y enseñarle dónde deben hacer las cosas. No puede dejar de intentarlo porque el jugador de River siempre tiene que tener algo más, así lo veo yo: querés pisar la pelota, hacelo, pero sabiendo para qué la pisas y por qué la pisás; querés gambetear a uno o a dos, hacelo, ahora si ya tenés un pase o una finalización de jugada, no te quedes con la pelota. Hay que enseñarles en qué momento se hacen ciertas y determinadas cosas, pero no hay que cortarle las alas. En el futbol argentino o mundial, la toma de decisiones a veces se hace en función de lo que el técnico le dice al jugador. Yo siempre le digo a los técnicos que no le hablen al que lleva la pelota, porque sino deja de ser una toma de decisión. El jugador tiene que hacerlo en forma personal, y entonces le preguntás por qué lo hizo. Pero tiene que animarse y atreverse a ser distinto, a querer más. No a querer ganar colgado del travesaño sino habiendo intentado buscar el partido de la mejor manera. Son factores fundamentales que el chico de River tiene que entender y que está para eso, porque la historia de River te exige justamente eso y lo tenemos muy claro. Y vos no podés ir en contra de una historia.

¿Lo fundamental es formar y potenciar a los jugadores?
No todo es lineal y por eso tenés que tener impronta, porque el fútbol es un juego impredecible en un montón de situaciones y fases. Para eso hay que entrenar los recursos que tienen los chicos, hay que aportar hacia arriba. No me interesa jugar las categorías fijas para decir voy a ganar porque con estos chicos voy a marcar diferencia, eso no sirve. Potenciar a chicos se trata de otra cosa, formar jugadores y personas, eso es lo fundamental.

¿Juega un papel fundamental la educación?
Si bien sabemos que los chicos llegan para jugar al fútbol, es fundamental el tema educativo. Cuanto más piensen los chicos, mejor, y nosotros tenemos que ayudarlos a pensar lo pensado. Hay que invitarlos a que resuelvan, vos le das contenidos y herramientas, pero los que resuelven son ellos. En lo futbolístico se trata de potenciar, de que el chico aprenda, que sepa a lo que juega, para qué juega, cómo lo hace, tanto de manera individual como colectiva. Si bien vos jugás para el otro, después tenés que tener esos detalles individuales que van a marcar la diferencia.

¿Cómo es el lineamiento con el juego de la Primera?
Lo hablamos con Martín (Demichelis) y la idea es juntar algunos lineamientos, no todos. La Cuarta División, que va a ser sparring de la Primera y también la Reserva, tienen que saber los movimientos que hace la Primera, más que nada para poder facilitar las cosas. Estamos trabajando para unificar criterios en cuanto a movimientos.

¿Qué importancia le das a lo mental?
Lo mental es fundamental y más estando en River, porqué más allá de lo físico y lo técnico, sin esa parte es imposible jugar. River es un club que demanda y demanda continuamente, entonces tenés que estar preparado para soportar tanto lo bueno como lo malo, porque ambas cosas van de la mano. Cuando las cosas no vienen bien, tenés que estar preparado para jugar en River, y cuando las cosas funcionan, debés estar listo para soportar la presión que esto genera.

¿Qué otras cosas hay que inculcarles a los chicos?
La parte de formación de un jugador nunca se acaba, creo que se termina el día en que te retirás. Todos los días vas a aprender algo. Hay que enseñarles a perder y a ganar, eso es importantísimo, de qué manera ganás y de qué manera perdés. La frase que define a River lo dice muy claro: Vivir y jugar con Grandeza. Eso es lo que nosotros tenemos que lograr con el jugador. Por eso a mí me parece fundamental inculcarles cuestiones como que no hagan tiempo, no estar discutiendo cada fallo del árbitro, que los técnicos sean muy ordenados a la hora de dar instrucciones. Son cosas que nosotros tenemos que lograr para que el chico juegue solo y tenga la libertad de decidir qué hacer.

¿Cómo tenés pensado el tema de la captación?

Es algo fundamental y que exige agudizar el ojo, porque no se trata de llevar por llevar. Hay que incorporar lo mejor y más adecuado, no se trata de cantidad sino de calidad. Ahí va a estar Fabio Radaelli junto con con Luciano Carnevale, que es coordinador de los preparadores físicos, gente con mucha experiencia y de mi absoluta confianza. Y en las infantiles está Gabriel Rodríguez, que ya lleva tantos años que no hace falta explicar todo lo bueno que hizo y viene haciendo. Hay una estructura muy bien armada.

¿Y cómo te tomás esto en lo personal?
Estoy muy bien, soy una persona que atiende a todo el mundo y cuando me llegó esta oportunidad sentí que era muy difícil dejarla pasar. Me agarra en una etapa de mi vida en la que estoy muy tranquilo y con más experiencia. Espero volcarla de la mejor manera, con manejo de grupo y liderazgo, cosas que son fundamentales hoy en día y que tienen que ver con el saber gestionar.